La liposucción se encuentra asociada a tratamientos estéticos, sin embargo, también se usa para curar enfermedades como el lipedema.
Cuando el lipedema alcanza niveles altos el único tratamiento posible es la cirugía. No obstante, no todas las técnicas de extracción de grasa son efectivas para curar esta patología.
En este artículo te hablamos de la liposucción asistida por agua o WAL. También es conocida como Agualipo. Si estás interesado en conocer otros tratamientos quirúrgicos efectivos contra el lipedema puedes consultarlo aquí.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoció en 2018 al lipedema como una enfermedad. No es una patología fácil de diagnosticar y en ocasiones de forma errónea la catalogan de linfedema u obesidad. En otro artículo ya te contamos las diferencias entre lipedema y linfedema. En la actualidad existen dos pruebas para certificar la enfermedad de lipedema: eco doppler para descartar daños en el sistema venoso profundo y una linfografía, en la que se elimina la posibilidad de que sea una afección del sistema linfático.
El lipedema es una enfermedad que no tiene cura y afecta negativamente a la calidad de vida de quienes la padecen. No obstante, gracias a la liposucción WAL los síntomas pueden mejorar de forma considerable.
Liposucción WAL
Uno de los mejores tratamientos quirúrgicos para curar el lipedema es la técnica o liposucción WAL (Water-Jet Assisted Liposuction), pues está dando muy buenos resultados.
A través de unas incisiones milimétricas, se introduce una pequeña cánula que instila suero salino pulverizado que desprende los adipocitos. Se trata de una técnica delicada en la que se ven involucrados los vasos sanguíneos, tejido conectivo y vasos linfáticos. Es por eso que recomendamos que esta cirugía la lleve a cabo un equipo de cirujanos especializados en lipedema.
Beneficios de la liposucción WAL
- Es delicada con los tejidos.
- Las molestias tras la cirugía son mínimas.
- La recuperación es rápida.
- Obtención de mayores volúmenes de tejido grado.
- Los resultados se pueden predecir.
- Mayor detalle en la definición.
- Más seguridad y control en la ejecución de la operación.
Pasos previos a la intervención quirúrgica
El caso de cada paciente debe ser evaluado para confirmar que el diagnóstico de lipedema es correcto. Además, se debe valorar si el paciente es un candidato adecuado para la realización de la liposucción WAL. Para ello, se tienen en cuenta factores como la edad, la sintomatología, el grado de la enfermedad o las patologías acompañantes. Además, se debe asegurar que se va a obtener un claro beneficio de este tratamiento.
Una vez se hayan realizado las consideraciones previas, se pone en marcha un plan de tratamiento adaptado a cada paciente. Esto incluye medidas dietéticas y la solicitud de pruebas preoperatorias. Además, el paciente deberá utilizar medias de comprensión durante un tiempo para adaptarse a su utilización y comenzar a preparar el tejido graso.
El día de la intervención quirúrgica se vuelve a evaluar todo antes de entrar al quirófano. Se repasan de manera conjunta los objetivos, se resuelven las dudas de última hora si fuera necesario y se hace el marcaje de las áreas a tratar.
Operación de lipedema con liposucción WAL
La técnica WAL permite succionar la grasa sin dañar el sistema linfático ni el sistema venoso. Se trata de una liposucción asistida por chorros de agua, lo que permite respetar los tejidos. Por ello, se sitúa como la técnica más segura y menos invasiva para tratar el lipedema.
La finalidad de esta intervención quirúrgica no es tanto la remodelación de la figura como la extracción de la mayor cantidad de grasa posible en cada intervención. Frecuentemente son necesarias entre dos y tres sesiones para completar el tratamiento. Esto es así por la seguridad del paciente, ya que en una cirugía de liposucción no se debe extraer más del 10 por ciento del peso de esa persona, ya que podría verse comprometido el equilibrio hidroelectrolítico, entre otras.
Recuperación tras la cirugía
Los pacientes de lipedema tienden a una mayor incidencia de inflamación tras una intervención quirúrgica. Esto se traduce en una recuperación más lenta que requerirá algunos tratamientos adicionales, que también contribuirán en la aseguración de los resultados:
- Algunas técnicas de fisioterapia especializada.
- Drenaje linfático manual.
- Radiofrecuencia Indiba Deep Care.
- Presoterapia.
- Recomendaciones dietéticas.
- Medidas higiénicas para una evolución favorable.
Desde Lipepedia queremos ayudarte a encontrar la mejor solución para tratar tu lipedema. Por eso, si estás pensando en someterte a una cirugía o necesitas información adicional de cualquier otra cuestión, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.