Una vez nos han diagnosticado que sufrimos lipedema debemos buscar tratamientos que nos ayuden a superarlo para recuperar la forma natural de nuestras piernas, acabar con los dolores que provoca esta enfermedad y poder tener un estilo de vida normal.
Medias de compresión.
A la hora de buscar una solución para curar el lipedema encontramos diferentes tratamientos. Las medias de compresión es un método conservador que no requiere de cirugía. Se trata de utilizar unas medias especiales que la paciente se coloca en las piernas. Al llevar puestas estas medias conseguimos frenar el crecimiento de las células grasas, por lo que es fundamental para evitar que la enfermedad se siga agravando.
Además de frenar el desarrollo del lipedema, las medias de compresión alivian los dolores corporales que provoca esta enfermedad. Para conseguir los resultados que buscamos a través de este tratamiento es necesario llevar las medias puestas entre 12 y 16 horas al día. Las medias de compresión es un método que va a ayudar a las personas que sufren lipedema a realizar una vida más cómoda y con menos dolor. Sin embargo, no es el tratamiento con el que se va a conseguir reducir de una forma considerable la grasa acumulada en las piernas.
Drenaje Linfático Manual.
Siguiendo con los tratamientos que no requieren de cirugía tenemos el drenaje linfático manual. Se trata de un masaje manual que tiene como objetivo favorecer la circulación linfática de las piernas.
En un masaje suave que no provoca ningún tipo de dolor en la paciente. Consigue un efecto similar a las medias de compresión, ya que nos ayuda a mejorar la circulación y la forma y posición de la piel. Esto nos lleva aliviar los dolores musculares que provoca el lipedema, ayudándonos a mejorar la movilidad de las piernas.
Presoterapia.
Otro tratamiento que nos va a ayudar a recuperarnos del lipedema es la presoterapia, ya que favorece el drenaje linfático. Esto hace que sea ideal para personas con una acumulación excesiva de grasa.
Durante este tratamiento, la paciente introduce sus piernas en un traje hermético que cuenta con varias secciones de aire. De esta forma, se realizan masajes en las piernas empleando la presión del aire.
Los tratamientos no quirúrgicos no aportan una solución definitiva para curar el lipedema, pero son muy importantes para ayudar a las personas que sufren esta enfermedad a llevar una vida más sencilla, con mayor movilidad y con menos dolores.
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